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El viaje oficial que Lula tenía previsto
realizar la semana que viene a Marruecos habría
sido anulado en el último momento por Rabat en
virtud de divergencias sobre la cuestión del
Sáhara Occidental, según el diario Correio
Braziliense del pasado viernes. Según el
periódico, la embajadora de Marruecos en
Brasilia, Farida Jaidi, indicó al rotativo la
víspera de la cancelación, que el “principal
objetivo del viaje es conseguir el apoyo de
Brasil” al plan marroquí de autonomía para el
Sáhara Occidental.
Lula tenía previsto llegar a Marruecos el 5 de
junio proveniente de la India, antes de
trasladarse a Alemania el 7 de junio, donde
participará en la cumbre del G-8. Pero el
miércoles, un comunicado de la presidencia
brasileña anunció que “a petición del gobierno
marroquí, la visita del presidente Luiz Inacio
Lula da Silva a Marruecos ha sido pospuesta a
una fecha que debe ser acordada entre ambas
partes”. El portavoz de Lula, Marcelo Baumbach
explicó que esta solicitud había sido motivada
por “problemas de orden interno” marroquíes. Una
fuente gubernamental brasileña que ha preferido
guardar el anonimato reconoció a la AFP que
existían “algunas posiciones diferentes” sobre
la cuestión del Sáhara Occidental. “Pero no creo
que esa haya sido la causa de la anulación del
viaje”, afirmó la misma fuente.
Recordemos que el gobierno brasileño no se ha
posicionado hasta el momento sobre el citado
plan. “Estamos todavía reuniendo los elementos
para construir una posición equilibrada”,
aseguró una fuente diplomática brasileña al
Correio Braziliense. Según el diario
Brasilia, que cita una fuente gubernamental
marroquí, Rabat espera que Brasil “entienda lo
que está en juego, demarcándose de la posición
argelina y venezolana sobre el asunto”.
El Frente POLISARIO ha rechazado el plan
marroquí y reafirmado “el derecho del pueblo
saharaui a la autodeterminación”. Esta postura
tiene el apoyo de numerosos países de América
Latina como Cuba, Venezuela, Uruguay, Bolivia y
Ecuador, entre otros. Brasil no se ha
posicionado, pero el Frente POLISARIO goza de
simpatías en el seno del Partido de los
Trabajadores de Lula.
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