El Gobierno saharaui ha reclamado de la Unión Europea (UE) que separe las aguas territoriales saharauis de sus acuerdos de pesca con Rabat, estimando que los recursos naturales del Sáhara Occidental pertenecen a su pueblo aún bajo la dominación colonial marroquí, cuyas riquezas no pueden ser explotadas por el ocupante, según el Derecho Internacional.
"El Gobierno saharaui hace un llamamiento a los Gobiernos de la Unión Europea para hacer que sus pueblos eviten mezclarse en una actividad ilícita e inmoral, que reconoce la ilegal presencia colonial marroquí en el Sáhara Occidental y que participa en intensificar la inestabilidad en la región", indica un comunicado del
Ministerio de Información, hecho público el martes.
La UE está dividida sobre la situación jurídica de las aguas territoriales del Sáhara Occidental, ocupado militarmente por Marruecos, y los pescadores comunitarios deberán esperar a que los servicios jurídicos del Consejo de la Unión se pronuncien el próximo jueves sobre la legalidad o no del acuerdo de pesca firmado con Marruecos.
El Gobierno saharaui ha recordado el parecer jurídico emitido en 2002 por el Secretario adjunto de Temas Jurídicos de las Naciones Unidas, Hans Corell, que estipula que toda explotación de los recursos naturales del Sáhara Occidental constituye una "violación de la legalidad internacional", mientras la descolonización de ese territorio no autónomo no esté acabada a través de la organización de un referéndum de autodeterminación democrático y transparente.
Para el ejecutivo saharaui, el territorio "sigue estando bajo la responsabilidad de la ONU" y "ningún país reconoce a Marruecos ningún tipo de soberanía sobre el Sáhara Occidental", recordando que los Estados Unidos de Norteamérica "separaron claramente al país de los Acuerdos de Libre Cambio con Rabat".
España, en cuanto potencia administrativa en virtud del Derecho Internacional, admitió recientemente que desde su retirada del Sáhara Occidental en 1976 hasta el presente "no ha habido disposiciones jurídicas sobre el estatuto jurídico de las aguas" del territorio.
Un equipo de activistas de 19 países de Europa comenzó el pasado 14 de febrero una campaña internacional para impedir que la UE ratifique este acuerdo de pesca con Marruecos, estimando que en su estado actual violaría el Derecho Internacional y permitiría a los barcos europeos pescar en completa ilegalidad en las aguas de la última colonia del continente africano, el Sáhara Occidental.
La campaña "¡Pescad en otra parte!" pide a los cargos del Parlamento Europeo y a los Estados miembros de la UE que "prohíban expresamente toda pesca hecha por barcos europeos en las aguas del Sáhara Occidental".
Nick Dearden, Director de campaña por la asociación británica War on Want, comprobó que
"el mismo año en que el pueblo saharaui conmemora los 30 años que ha pasado en campamentos de refugiados, la UE firma un acuerdo de pesca que permitirá a países europeos aprovecharse de su miseria. Pedimos a la UE que enmiende ese acuerdo, que en el estado actual está en completa contradicción con la política y los principios de la UE y de sus Estados miembros".
Para toda información sobre esta campaña, sobre el asunto de la pesca y los puntos de contacto europeos, visítese la página:
www.fishelsewhere.org
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