“Las inundaciones no han hecho más que reafirmar nuestra
convicción y las celebraciones del XXX Aniversario de la
RASD en cada campamento han servido para reforzar nuestra
lucha contra el colonialismo”. Con estas palabras, el
Primer Ministro de la República Árabe Saharaui Democrática
(RASD), Taleb Omar, inauguraba la I Conferencia
Internacional de Apoyo a la Autodeterminación del Pueblo
Saharaui el 25 de febrero en el campamento de refugiados
de El Aaiún. Unas palabras que resumen a la perfección el
espíritu de un acto que reunió en la wilaya saharaui a
delegaciones llegadas de todos los rincones del planeta y
a representantes de todos los sectores de la sociedad
civil internacional. Parlamentarios, políticos,
sindicalistas, artistas, activistas de derechos humanos,
juristas, periodistas y miembros del movimiento de
solidaridad con el pueblo saharaui de los cinco
continentes abarrotaron la escuela Olof Palme, lugar del
encuentro. Además de la numerosísima delegación argelina,
más de 500 personas de países tan diversos como Francia,
Tanzania, Nigeria, España, Japón, Italia, Mauritania,
Australia, Venezuela o Cuba, entre otros, convirtieron la
hammada argelina en una tribuna privilegiada de
solidaridad con la causa saharaui. Una respuesta que “nos
llena de fuerza y estímulo, sobretodo en estos momentos
tan duros, tras las inundaciones”, afirmó el alcalde de El
Aaiún en su discurso de bienvenida.
Dividida en cuatro ejes temáticos, “historia de la RASD”,
“la lucha del pueblo saharaui, hoy”, “la responsabilidad
de la ONU y la comunidad internacional” y “la solidaridad
internacional”, la conferencia, que se prolongó por
espacio de seis horas, prestó una atención especial a la
revuelta que desde el pasado mes de mayo se vive en los
territorios ocupados de la RASD. Para el representante de
la Coordinadora de Asociaciones de Amistad con el Pueblo
Saharaui de España, Carmelo Ramírez, la “intifada de la
independencia confirma un nuevo escenario”, que “nos
obliga” a “readaptar nuestra estrategia después de 30
años”. Reiterando que “no existen otras vías al referéndum
de autodeterminación” en alusión a la última propuesta de
autonomía anunciada por Rabat, Ramírez propuso al
movimiento de solidaridad dar prioridad en estos momentos
a la lucha en las zonas ocupadas y a la denuncia contra
Marruecos de las violaciones de derechos humanos. El
recuerdo a los saharauis represaliados por el gobierno de
Mohamed VI en las zonas colonizadas estuvo presente en la
práctica totalidad de los discursos de la jornada. En este
sentido, José Briones, de la Asociación Internacional de
Juristas por el Sáhara Occidental, recordó la reciente
publicación de un informe del Consejo General de la
Abogacía de España sobre los juicios contra activistas
saharauis en el que se denuncia la falta de garantías
procesales de los acusados. Centrándose en el proceso
contra los “catorce del Aaiún”, que concluyó el pasado mes
de diciembre con penas que van de los seis meses de cárcel
a los tres años de cárcel, Briones insistió también en la
inacción de la MINURSO no solo ante estos juicios, a los
que ni siquiera va, sino también ante la represión
violenta de los funcionarios marroquíes en cualquier
manifestación independentista.
Un representante de la “prensa independiente” de
Mauritania, por su parte, criticó la pasividad de la
mayoría de los países árabes ante estas violaciones de
derechos humanos y llamó a ejercer presión sobre sus
gobiernos para que adopten una posición firme de apoyo al
proceso de autodeterminación de la RASD.
Papel de España
De igual manera, la posición del gobierno español respecto
a la cuestión saharaui fue ampliamente criticada durante
todo el foro internacional. El delegado de Cuba, en una
alocución contundente, espetó a los presentes a presionar
al gobierno de Zapatero para que reconozca a la RASD y al
Polisario como único y legítimo representante del pueblo
saharaui, ya que España sigue teniendo una responsabilidad
enorme en la cuestión y no “puede esconderse detrás de la
Unión Europea”. El cubano, como más adelante haría un
delegado de Portugal, animó a España a seguir los mismos
pasos que realizó este país para llevar a su fin el
conflicto territorial de Timor Oriental.
España, junto con Argelia, fue el estado con la delegación
más numerosa. A la tribuna del Aaiún subieron
representantes de regiones como Galicia, Aragón, Cataluña
y Asturias, de sindicatos como USO, eurodiputados como
Meyer (IU) e incluso la Coordinadora del Intergrupo
Parlamentario “Paz y libertad para el Sáhara”, la
socialista Clemencia Torrado. Esta última, además de
recordar la importante “ayuda humanitaria” prestada por su
país tras las inundaciones, informó de un reciente acuerdo
del Congreso de los Diputados que insta al gobierno
español a dar todos “los pasos necesarios para solucionar
el problema del Sáhara Occidental”.
El
papel de la mujer saharaui en la lucha por la
autodeterminación de su pueblo fue otra de las cuestiones
destacadas de la jornada, especialmente entre las
oradoras. Así, la Presidenta de la Unión Nacional de
Mujeres Saharauis, Fatma Mehri, remarcó el “aporte
decisivo de las mujeres en la organización de los
campamentos y ahora en la lucha en los territorios
ocupados”, como es el caso de la histórica activista
Aminetu Haidar.
Desfile
La conferencia internacional fue precedida de un colorido
desfile en el que participaron casi todos los exponentes
de la sociedad civil saharaui, del mundo laboral y
estudiantil, en el que tuvieron un papel destacado los
niños y los jóvenes. |