La República Árabe Saharaui Democrática (RASD) ha
anunciado el comienzo oficial del concurso para la
obtención de permisos de prospección petrolífera en los
territorios saharauis, "de acuerdo con la opinión legal de
la ONU en relación con las actividades comerciales en el
Sáhara Occidental", ha indicado un comunicado hecho
público el martes por la RASD, del que SPS ha recibido una
copia.
La RASD ha anunciado oficialmente que "la participación para
obtener el permiso de prospección de petróleo en los
territorios saharauis (‘onshore’), que se emprende de
acuerdo con la opinión legal de la ONU en relación con las
actividades comerciales en el Sáhara Occidental, está
abierto para todas las empresas competentes y
cualificadas", se lee en el texto.
"El Gobierno de la RASD está satisfecho de la respuesta masiva al
ofrecimiento de permisos de prospección ‘offshore’ y del
gran apoyo que ha recibido de las empresas
internacionales. El Gobierno reconoce el papel vital que
las fuentes de energía tendrán en el desarrollo del país
después de la independencia, y por consiguiente es
necesario equilibrar el programa de prospección ‘offshore’
con proyectos de prospección ‘onshore", precisa el
comunicado que cita a Mohamed Jadad,
miembro del Secretariado Nacional del Frente Polisario que
se encarga de este asunto.
Por otra parte, están en curso las negociaciones entre seis firmas
petrolíferas británicas y el Frente Polisario para obtener
el permiso de prospección de petróleo a lo largo de las
costas saharauis (‘offshore’), en el marco del llamamiento
de oferta hecho público por el Frente Polisario en mayo de
2005, como reveló el asistente del representante del
Frente en Londres, Mohamed Limam, citado por la agencia de
prensa argelina APS.
La fórmula propuesta por el Polisario prevé que las sociedades
detentadoras de un permiso de prospección de petróleo
iniciarán sus actividades después de que recobre su
soberanía la República Árabe Saharaui Democrática (RASD)
sobre el conjunto de sus territorios.
El Frente Polisario ha propuesto igualmente a las empresas
interesadas dos tipos de contratos, el primero de los
cuales prevé un acuerdo sobre la base de compartir la
producción una vez que la soberanía de la RASD sobre sus
riquezas esté completamente restaurada, mientras que el
segundo tipo de contrato prevé que se concedan los
permisos sobre la base de un acuerdo sobre las garantías
que cubren el período que separa las fechas de firma y las
de entrada en vigor del contrato, fórmula que parece ser
la que prefieren las firmas interesadas.
De acuerdo con esta fórmula, las empresas contratantes adquieren
ante la RASD contrapartidas financieras que el Gobierno
saharaui dedicará al desarrollo de los sectores
prioritarios, especialmente la formación y la prospección
de otros yacimientos mineros.
Al referirse al parecer jurídico emitido por la ONU en enero de
2002 negándole a Marruecos la soberanía sobre el Sáhara
Occidental, y haciendo de hecho nulo y no avenido todo
contrato firmado por Rabat sobre la explotación de las
riquezas saharauis, la Directiva saharaui advirtió de que
todo acuerdo concluido con las fuerzas de ocupación
(Marruecos) sería caduco y contrario al derecho
internacional. |