El embajador saharaui en Argel, Mohamed Yeslem Beissat,
puso en guardia el viernes, contra un posible "genocidio"
en los territorios ocupados del Sáhara Occidental,
escenario desde finales de octubre de manifestaciones
pacíficas por la autodeterminación, "violentamente
reprimidas" por las autoridades coloniales
marroquíes.
"Desde el asesinato del mártir Lembarki Hamdi por la
policía marroquí el 30 de octubre, la resistencia pacífica
en los territorios ocupados del Sáhara Occidental ha
tomado una nueva dimensión", declaró el Sr. Beissat
durante una rueda de prensa en la sede de la embajada
saharaui en Argel.
"Actualmente, manifestaciones diarias de carácter pacífico
se desarrollan en El Aaiun y en las demás ciudades del
Sáhara Occidental", afirmó el embajador.
Estas manifestaciones "son violentamente reprimidas por
las autoridades marroquíes", añadió, avanzando el balance
de "centenares de heridos y decenas de detenidos".
"Ponemos en guardia a la comunidad internacional de que la
situación en los territorios ocupados corre el riesgo de
empeorar en todo momento y transformarse en un verdadero
genocidio", insistió.
El movimiento de protesta de los civiles saharauis "tiene
cuatro objetivos: pedir la celebración de un referéndum de
autodeterminación, la liberación de los presos políticos,
el respeto de los Derechos Humanos y la apertura de los
territorios ocupados a los medios de comunicación y a las
ONG internacionales", explicó Beissat.
Contra "manifestantes cuyas únicas armas son la huelga de
hambre y las sentadas, el Gobierno marroquí recurre a la
fuerza desmesurada, a las detenciones arbitrarias y a la
tortura", se indignó, denunciando igualmente "el silencio
cómplice de algunos países europeos".
Por otra parte, el diplomático saharaui anunció que el
martes próximo, unos cuarenta militantes saharauis de los
Derechos Humanos, entre ellos Aminetu Haidar y Ali Salem
Tamek, serán llevados ante un tribunal marroquí en El
Aaiun.
"Pedimos a los medios de comunicación y a las
organizaciones humanitarias del mundo entero que sean
testigos de esta mascarada judicial", dijo Beissat.
"Treinta años de ocupación son suficientes para demostrar
que los saharauis no son marroquíes y que lucharán hasta
el final para ejercer su derecho a la autodeterminación",
afirmó el embajador.
Por su parte, el secretario general de la Unión de
Juristas Saharauis, Aba Salek El Haissen, pidió durante la
rueda de prensa en la que participó también el secretario
general de la Asociación de Familias de los Desaparecidos
Saharauis AFAPREDESA, Abdessalem Omar, la puesta en marcha
de una comisión de investigación internacional, bajo la
égida de la ONU, para "hacer la luz sobre la suerte de los
miles de desaparecidos saharauis durante los 30 años de
ocupación marroquí".
Aba Salek El Haissen anunció igualmente que se ha
publicado un libro "trazando la triste historia de las
violaciones marroquíes de los Derechos Humanos en el
Sáhara Occidental".
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